Tu cuerpo no responde igual al ejercicio con 35 grados a la sombra. Esto es lo que tienes que saber antes de salir a sudar.
El calor es estresante para el cuerpo humano. Si hacemos ejercicio en condiciones de mucho calor y humedad, el cuerpo se calienta por partida doble: porque hace calor y porque estamos heciendo un esfuerzo muscular. Ahí entra en juego nuestro mecanismo de regulación y nos ponemos a sudar. Pero a veces no es suficiente para evitar el aumento de nuestra temperatura.
El resultado un descenso del rendimiento. Con calor corremos menos, pedaleamos con menos fuerza y levantamos menos peso. Si pasamos varios días en un sitio caluroso y húmedo, el cuerpo termina aclimatándose, aprendiendo a sudar más. Pero sin aclimatación, hay riesgo de sufrir un golpe de calor. No te calientes:
- Enfriarse antes: Un buen truco para aguantar mejor el calor en esa larga travesía por la montaña o recorrido en bibicleta es intentar bajar nuestra temperatura corporal antes de salir. Enfría una toalla húmeda en la nevera y póntela alrededor del cuello.
- El mejor momento del día: Evita hacer deporte al aire libre a mediodía, cuando el sol está alto y hace más calor. Elige la mañana o al atardecer.
- Agua y más agua: Cuando tu cuerpo está perdiendo mucha agua y sales por el sudor. recuerda beber constantemente, antes incluso de sentir sed, y come algo ligero en las pausas, como fruta o frutos secos.
Los síntomas de un golpe de calor son sudor copioso, palidez, calambres, fatiga, dolor de cabeza, nauseas y pérdida del conocimiento. Lo más importante es beber agua o zumos (nada de alcohol), descansar y tomar un baño o ducha, o bien entrar en algún sitio con aire acondicionado para bajar la temperatura del cuerpo.
Foto: I Run Flint
Me cuesta mucho entender que haya gente que, sin necesidad aparente, se ponga a correr a las 12 en pleno verano cerca de la playa, por ejemplo. Para mí es un misterio. ¿Tiene algún beneficio que no se me ocurra?
Correr siempre tiene beneficios, pero sufrir una insolación no 😉